El Real Zaragoza, cuesta abajo y sin frenos

JAVIER IBÁÑEZ/ESPIRITU DEPORTIVO. La mala dinámica que ha cogido el Real Zaragoza es preocupante, sumando 7 partidos sin ganar desde que empezó el año y con solo 3 victorias como local en toda la temporada, colocándose tan solo a 4 puntos del descenso.

El conjunto zaragocista desde que comenzó la temporada ha ido de más a menos y con el paso de las jornadas el equipo se ha ido resquebrajando. No se tiene la solidez mostrada al inicio y las sensaciones no son demasiado buenas de cara a una inmediata reacción. Pero no se puede seguir así. El equipo está igual que en la temporada 2009-2010, en decimoséptima posición y con 24 puntos, con la diferencia de que el equipo sufre una involución preocupante.

La liga va entrando en su fase decisiva y no hay tiempo para lloros ni lamentos, solo queda trabajar, luchar y apostar por lo seguro. Es el momento de que Jiménez se deje de probaturas extrañas o inseguridades más que demostradas. Es la hora de que por ejemplo Paredes no vuelva a salir de inicio. Achacar los males del equipo a un solo jugador no es justo, pero en numerosas ocasiones, Javier Paredes ha sido participe de muchos goles encajados y errores, y es que los datos están ahí. De las 7 ocasiones que el capitán zaragocista ha sido titular, el equipo no ha conseguido ganar (también han influido diversas decisiones arbitrales, todo hay que decirlo). Su último error en la marca a Kike Sola le costó un gol vital al Real Zaragoza.

Tampoco es el momento, aunque esté lesionado, de hacer experimentos como se han hecho constantemente con Romaric, jugador que desde que llegó ha demostrado no estar en forma ni preparado y siguió teniendo minutos, incluso de titular en el pivote, una posición que requiere de un gran derroche físico. Lo mismo puede pasar con Rochina, jugador que ha demostrado tener pegada y buenos movimientos cerca del área, jugando en banda, posición en la que no rinde igual ni ofrece las mismas prestaciones que en la punta de ataque o media punta, su posición natural y en la que más puede aportar.

Con esos 4 puntos de ventaja sobre la segunda división, llega el momento de apostar por los que mejor están y que más rinden en su posición, apostar por la seguridad en un momento delicado en el que si el experimento sale mal las consecuencias son terribles. Ahora solo queda salir con las mejores armas y con más serenidad que nunca. Llega el momento de reacción antes de tocar fondo.

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