YERAY CORTÉS / ESPÍRITU DEPORTIVO. El Real Zaragoza logró empatar ante el Alavés, en un partido donde tuvo que jugar toda la segunda parte con un menos.
Foto: Liga de Fútbol Profesional
El Real Zaragoza tenía una oportunidad de oro para acercarse a los puestos de ascenso directo, pero debido al transcurso del partido el punto se puede considerar muy positivo. La expulsión de Culio al borde del descanso provocó que el cuadro blanquillo tuviera que defenderse con uñas y dientes durante el segundo acto. Al final, logró un punto que le mantiene en la pelea por el ascenso.
La igualdad fue la nota dominante en un primer tiempo donde las ocasiones fueron escasas. El Real Zaragoza logró hacerse con el control del cuero y eso evitó que el Alavés llegara con facilidad a la meta de Manu Herrera. A los doce minutos, Cabrera estuvo muy rápido para impedir que Juli rematara solo ante el portero zaragocista. Ángel fue el que tuvo la ocasión más clara del primer tiempo tras plantarse solo ante Pacheco, pero el guardameta del Alavés evitó con una buena intervención que el balón acabara en el fondo de la red. Poco antes de llegar al descanso, Culio veía la segunda tarjeta amarilla y el Real Zaragoza tenía que afrontar toda la segunda parte con un jugador menos.
Tras el descanso, el Alavés se volcó sobre la portería del Real Zaragoza y Pacheco avisó con un lanzamiento ajustado que se fue lamiendo el palo izquierdo de la meta de Manu Herrera. El joven jugador del Alavés se convertía en un auténtico quebradero de cabeza para los defensores zaragocistas, y un gran pase suyo lo desaprovechó Toquero cruzando el balón en exceso ante la salida de Herrera. Aunque el Alavés intentaba crear peligro con insistencia, Guitián y Cabrera lideraban una defensa muy seria del Real Zaragoza. Supo aguantar el 0-0 el cuadro de Lluís Carreras, y llevarse un punto de Mendizorroza.