YERAY CORTÉS / ESPÍRITU DEPORTIVO. El que fuera capitán del Real Zaragoza, es indiscutible en el Albacete.
Javier Paredes (Oviedo, 1982) permaneció durante siete temporadas en las filas del Real Zaragoza, disputando un total de 148 partidos y portando, en sus últimas campañas como jugador blanquillo, el brazalete de capitán. Unos datos que, sin embargo, no le valieron para ganarse a la afición zaragocista.
Al cierre del mercado invernal del 2013, tanto él como José María Movilla son despedidos del club, que alega causas económicas. Una deicisión que la cúpula directiva del club toma después de que ambos jugadores, y José Mari, estuvieran entrenando al margen al denunciar a la entidad por impago.
Finalmente, 'El Jabalí' ponía fin a su vínculo contractual con el Real Zaragoza y se marchaba por la puerta de atrás. Tal y como él mismo reconoció en una entrevista a Marca este año, se fue del club "dolido porque después de ocho años y de haber dado la cara por el equipo, me dolió que por un personaje, por una decisión personal y de venganza, tuviera que irme".
Javier Paredes estuvo casi un año sin jugar al fútbol, hasta que en diciembre del 2014 aparece el Albacete para ofrecerle un contrato hasta final de temporada. El asturiano se incorpora al club manchego y participa en 21 partidos, ganándose la renovación por una campaña más.
En Albacete, Paredes está volviendo a disfrutar del fútbol y, en la presente temporada, es el tercer jugador más utilizado por César Sampedro. Además, el pasado fin de semana logró volver a marcar en Segunda División, algo que no hacía desde hace más de 10 años, cuando defendiendo la camiseta del Real Oviedo marcó al Real Murcia (28/04/2002).
De estar a un paso de la retirada, a volver a disfrutar con el fútbol. Ésta es la historia de Javier Paredes Arango.
Foto: Liga de Fútbol Profesional