GUILLERMO COSCOLLA / ESPÍRITU DEPORTIVO. El Real Zaragoza no pudo empezar peor el nuevo año 2015. El técnico, Ranko Popovic, ya sabe lo que es perder con su nuevo equipo (0-2)
No era el rival más adecuado para dar la bienvenida al 2015 en La Romareda, pero el nuevo Real Zaragoza de Ranko Popovic, que se marchó al parón navideño sin conocer la derrota, llegó al partido de esta misma mañana ante el Real Valladolid con la máxima ilusión posible y, como dijo el técnico en la rueda de prensa previa al encuentro, en buen estado de forma.
Dos equipos llamados a estar entre los 6 primeros a final de temporada, se dieron cita en el Municipal de La Romareda a las 12:00. Real Zaragoza y Real Valladolid, llegaron a la cita sin perder su último compromiso liguero. Los blanquillos empataron en Anduva (1-1) y los de Pucela, cerraron el año con una amplia victoria ante el filial blaugrana.
La buena mañana que salió en la Capital del Ebro propicio que al primer partido del año en La Romareda se dieran cita más de 12.000 personas, ilusionadas y con ganas de celebrar una victoria más y ante un rival histórico del fútbol español. Pero esas ganas de ver ganar al Real Zaragoza, se iban a poner cuesta arriba nada más empezar el encuentro. En el minuto 1 de partido, en la primera jugada, los pupilos de “Rubi” iban a conseguir abrir el marcador poniendo el 0-1 en una jugada en donde el ex zaragocista Óscar aprovechó un error defensivo y consiguió batir aWhalley.
Con el gol encajado, el Real Zaragoza siguió viéndose superado por el rival, llegándose a escuchar algunos tímidos silbidos en la grada tras el mal arranque de los blanquillos. Era un Real Zaragoza irreconocible desde la llegada dePopovic. La presión, intensidad y dominio de balón con el que se había caracterizado durante los primeros partidos, hoy ante el Real Valladolid, apenas apareció. 14 minutos más tarde, del primer tanto del encuentro, los visitantes volvieron a anotar el segundo gol de forma merecida dada la superioridad y la demostración de querer ir a por el partido. Algo, que el Real Zaragoza, si lo intentó no lo logró. Otra vez, Óscar aunque en más que posible fuera de juego, fue el encargado de poner el 0-2 en el marcador. Resultado que no iba a moverse en resto del encuentro.
Tras el mazado del segundo gol, los dePopovic siguieron sin dar muestras para reaccionar y se veían incapaces de dar 5 pases seguidos. No existió conexión en el medio del campo y la defensa siguió siendo durante todo el partido un sufrir continuo. Al entrenador del Real Zaragoza no le gustó lo que vio sobre el césped, y no dudo en mover ficha dando entrada en el minuto 25 aBasha y retirando a Javi Álamo. Una clara muestra de que el medio del campo no estaba apareciendo y con la entrada de Basha, Galarreta ocupó, hasta que fue sustituido, su habitual posición. La media punta. El Real Valladolid, una vez lograda la renta de dos goles, se echó un poco más hacia atrás y bajo la intensidad pero a pesar de ello los locales no consiguieron sacar provecho. Fue pasada la media hora de partido, cuando el árbitro decidió entrar en escena y cobrar una importancia más de la debida.
El partido se fue al descanso con una victoria merecida para los de Pucela y con una actuación arbitral, una vez más, perjudicial para el Real Zaragoza. La Romareda fue consciente de las equivocadas decisiones del árbitro y despidió a éste con una sonora y merecida pitada.
Tras el paso por vestuario, el Real Zaragoza tuvo el 1-2 en la cabeza deCabrera pero su disparo no vio puerta. El rival, por su parte, acusó el esfuerzo de la primera mitad y el cuadro aragonés se dio cuenta de ello y empezó a entrar en el partido con más de peligro que en los primeros 45 minutos. El ataque zaragocista empezaba a contar con oportunidades y los Pedro, Eldin y Borja Bastón comenzaban a ver portería rival.
Poco fútbol se vio durante los últimos 45 minutos en donde los de Ranko Popovic, no sabían cómo superar a Javi Varas, que poco trabajo tuvo en el día de hoy. El árbitro, siguió siendo determinante durante la segunda mitad y empezaba a sacar de quicio a los jugadores y al propio entrenador, llegando a ser advertido por el colegiado.
Lo más positivo de la segunda mitad y del partido en general, fue la vuelta de Jesús Vallejo que ocupó la posición de Fernández, y que a pesar de no ser su posición natural, fue de lo más destacado del partido. Willian José por Ruiz de Galarreta en el minuto 70 fue la última bala de Popovic pero que de nada sirvió porque a pesar de los intentos en los últimos 10 minutos el cuadro aragonés iba a poner punto y final al partido sin conseguir marcar gol.
El partido acabó con derrota local por cero goles a dos, y el estreno de año en La Romareda no pudo ser peor. Popovic, cosechaba así su primera derrota al frente del Real Zaragoza en un mes clave para el devenir del equipo. La próxima prueba será en el Estadio del líder, Las Palmas.