DANIEL ORTE/ESPIRITU DEPORTIVO. El Real Zaragoza B se ha convertido esta mañana en equipo de Segunda División B tras vencer por 3 tantos a 1 al Trival Valderas de Alcorcón en un emocionante partido disputado en el Estadio Municipal de la Romareda ante casi 9.000 aficionados.
Pese a empezar perdiendo, dos goles de Adán Pérez y uno para redondear la mañana del capitán Álvaro Meseguer, suponen la consecución de un ascenso histórico para el equipo maño.
Y es que la cosa comenzaba mal para el filial, ya que en el minuto 11 se adelantaba en el marcador el Trival por medio de Propín. El defensor madrileño aprovechó un balón suelto de Aroca; quien protestó y mucho una posible falta, para anotar tras un corner.
Pero nuestros cachorros, que jugaban en un estadio acorde para la ocasión, supieron rehacerse en apenas dos minutos, justo cuando "El tarzán de Quinto" Adán Pérez recibió un pase de Juan Esnáider y quebró con un golpe de cadera al guardameta Kike para anotar a puerta vacía el empate a uno. Tras el gol, el filial comenzaba a jugar un nuevo partido, controlando el esférico y la posesión, hecho que al respetable no le ha gustado y ha comenzado a pitar al filial zaragocista. El 1 a 1 no se movió hasta el final de los primeros 45 minutos, y se llegó al descanso gracias a que los palos nos sonrieron, ya que Palacios, jugador más peligroso del Trival, estrelló un balón en el larguero de Aroca cuando la nutrida afición visitante (más de 250 aficionados) cantaba gol.
Tras la reanudación, el Real Zaragoza B, consiguió anotar el 2 a 1. Una buena apertura a la derecha de Juan Esnaider para Robert Simón, permitió al catalán internarse por el carril y lanzar un buen centro para que nuevamente el pichichi del Real Zaragoza B, Adán Pérez, anotase su segundo gol en el partido (22 en total) y adelantase a los blanquillos en el marcador y en la eliminatoria.
Larraz, movió el banquillo y Antón, Suárez y Samba entraron por Pablo, Adán y Esnáider. Y precisamente la pantera africana Samba Tounkara, quien fuera protagonista el pasado año en el ascenso del Sariñena, lo fue también hoy, cuando tras un balón en largo se plantó delante del guardameta Kike y lo regateó, igual que hiciese Adán en el empate a uno, pero Kike lo agarró y derribó cometiendo penalti y siendo expulsado el guardameta por interrumpir una ocasión manifiesta de gol. Parecía que en esta jugada iba a llegar el tercero, puesto que el Trival, había realizado también sus tres sustituciones y no pudo colocar a un portero nuevo, y tuvo que ser Herrero quien supliera la papeleta de situarse bajo palos.
El encargado de lanzar el penalti fue un desaparecido Diego Suárez, quien entró, a nuestro juicio, algo frío al campo. Lo lanzó flojo, mal y muy centrado, y el nuevo guardameta, madrileño, emulando a Pablo Benegas (ex Villanueva, ahora Teruel) detuvo sin muchos problemas la pena máxima. Desde entonces, el portero-jugador, estaba actuando de libre, para lanzar las contras de su equipo, y el Real Zaragoza lo podía aprovechar a la contra.
Un balón despejado por Carlos Javier (quien acabó lesionado) le llegó a Robert Simón, para que el extremo cabalgase por banda izquierda, superando rivales que le iban trabando para derribarlo. El colegiado, señaló ley de la ventaja, y el catalán; muy activo durante todo el encuentro, pudo efectuar un centro al corazón del área donde ya esperaba Samba para remachar a puerta; sin embargo, un león nacido en Alcañiz, con la "testiculina" suficiente como para recorrerse 90 metros corriendo en el minuto 93, superando rivales y obstáculos, aparecía por el borde del área; era el capitán, Álvaro Meseguer; quien, con coraje, rabia y corazón, remató a puerta y certificó la victoria al finalizar con éxito un nuevo contragolpe local.
Sin lugar a dudas, la persona que más merecía marcar del equipo lo había hecho. Álvaro Meseguer, zaragocista sufridor; capitán del equipo, habiendo superado más de dos años de lesiones de rodilla, lloraba, pero de alegría al anotar el 3 a 1 definitivo con el que se llegó al final de los 90 minutos. El Real Zaragoza B vuelve a la categoría que nunca debió perder; retorna y por la puerta grande a la Segunda División B. Larraz lo ha vuelto a hacer. ¡Enhorabuena chavales!