ESPIRITU DEPORTIVO. El Real Zaragoza superó al Girona por un gol a cero en el partido de la decimoquinta jornada de la Liga Adelante, disputado en el estadio de La Romareda.
El Real Zaragoza superó al Girona por un gol a cero en el partido de la decimoquinta jornada de la Liga Adelante, disputado en el estadio de La Romareda. Los aragoneses lograron volver al camino de la victoria en un partido en el que, por ocasiones y empuje, merecieron los tres puntos, conseguidos en el tramo final del choque gracias a un gol de Álvaro.
El equipo aragonés planteó un partido de intensidad, presión y velocidad como armas para superar a los gerundenses. Así llegaron las dos primeras ocasiones de peligro, ambas en botas de Roger Martí. En la primera, el delantero se encontró con el larguero en un tiro lejano, tras rechazar un defensa su lanzamiento. Mucho más clara fue la segunda, tras robarle la cartera al último defensa, el valenciano encaró a Becerra en el mano a mano, pero su tiro raso salió rozando el poste izquierdo de la meta visitante.
Ante un conjunto catalán que apenas inquietó a Leo Franco, siguió intentándolo el Real Zaragoza, decidido a abrir antes del descanso. Laguardia y Henríquez cabecearon fuera en dos acciones consecutivas y, posteriormente, Paglialunga volvió a probar fortuna desde lejos, sin suerte. Al borde del intermedio, Álvaro no alcanzó a cabecear por centímetros una falta lateral, cuando estaba en inmejorable posición para marcar.
Tras un inicio de segunda parte con muchas interrupciones, que no permitieron fluidez en el juego, los blanquillos comenzaron a poner cerco a la portería de Becerra. En tres minutos, los que van del 60 al 63, Roger, Paglialunga y Laguardia tuvieron buenas opciones para haber desequilibrado el marcador. Chus Herrero, en un despeje hacia su propia portería, tras un peligroso centro de Rico, también llevó el “¡huy!” a las gradas.
La intensidad zaragocista dio sus frutos en el tramo final del choque. Álvaro, tras recoger un balón suelto en el área, consiguió llevar la pelota a la red para firmar un triunfo balsámico para el Real Zaragoza, para su afición y para reforzar la moral del equipo de cara al tramo final de la primera vuelta del campeonato.