El Fútbol Emotion Zaragoza se ha visto obligado a ‘revolucionar’ su plantilla para intentar salir de la zona baja de la tabla.
Pintaba ilusionante la temporada para el Fútbol Emotion Zaragoza. Arturo Santamaría tomaba el relevo de Santi Herrero en el banquillo, y se hacía cargo de un equipo que mantenía a gran parte de los jugadores y, además, se veía reforzado con la llegada de Javi Alonso, Pedro Cary, Pablo Trasobares, Diego Sancho y Dani Álvarez. Desde el inicio, se plantearon unos objetivos ambiciosos que eran estar entre los ocho primeros clasificados para disputar la Copa de España y, posteriormente, los ‘Play-Off’ por el título de Liga.
Pero la realidad está siendo bien distinta. El equipo está peleando por evitar el descenso a Segunda División, lo que supondría un grave contratiempo -deportivo y económico- para la entidad que preside José Ramón Moreno. Además, en Copa del Rey fueron eliminados en primera ronda por L’Hospitalet Bellsport, y Arturo Santamaría fue cesado de su cargo. Tras la destitución de Arturo, la directiva del Club se ha visto obligada a tomar más decisiones, y los resultados determinarán si llegan a tiempo para lograr la permanencia.
Pedro Cary, uno de los jugadores llamados a ser referencia esta temporada, sorprendió al pedir la rescisión de su contrato. Pablo Trasobares también causaba baja ante la falta de minutos, como previsiblemente también lo harán Diego Sancho y Alí.
Para paliar esas bajas y aumentar el nivel del equipo, han llegado Juanqui y Hugo Bernardez. Además de Nano Modrego que, tras una polémica salida en el pasado verano, regresa para apurar su trayectoria en el fútbol sala. Y no se descarta que se incorpore algún jugador más antes de que acabe el mercado invernal.
Transcurridas 17 jornadas de Liga, el Fútbol Emotion Zaragoza se encuentra en la decimocuarta posición con 10 puntos, exactamente los mismos que el Burela Pescados Rubén y Ribera Navarra, los dos equipos que ocupan puestos de descenso.