GUILLERMO COSCOLLA / ESPÍRITU DEPORTIVO. Desde la temporada 2010/2011 no le habían mostrado la tarjeta de color rojo.
El primer partido del 2017 en La Romareda no dejó nada positivo para el Real Zaragoza. José Enrique abandonó el terreno de juego en el minuto 67, y podría tener una rotura en el sóleo de la pierna izquierda, Irureta, ingresado horas antes de comenzar el encuentro por problemas estomacales, volvió a ser el protagonista en la derrota del equipo blanquillo, el árbitro no señaló un penalti sobre Ángel, y los de Raúl Agné acabaron en inferioridad numérica por la doble amarilla que vio Rubén Gracia ‘Cani’ en el minuto 73.
La expulsión de Cani supone, junto a la lesión de José Enrique, un importante contratiempo para el técnico aragonés que no podrá contar con ninguno de los dos futbolistas para el encuentro ante el Tenerife que se disputará el sábado y que supondrá el cierre a la primera vuelta del campeonato.
El jugador de Torrero tuvo que salir del campo en el 73’ cuando el colegiado Areces Franco le mostró la segunda amarilla. Cani no vivía una situación así desde el 9 de enero de 2011. El mediapunta se encontraba en las filas del Villarreal y fue en la jornada18, en la visita al Santiago Bernabéu, cuando David Fernández Borbalán le mostró la cartulina roja en el minuto 83 de partido.
Desde entonces, 494 partidos en los que el jugador aragonés no volvió a ser expulsado hasta que el domingo pasado, ante el Girona, dejó a su equipo con 10 quedando 17 minutos por delante para la conclusión del partido.
El árbitro no reflejó en el acta los protestas de Cani por lo que sólo será suspendido con un partido y no será hasta el duelo frente al UCAM Murcia cuando Agné pueda contar con el jugador más talentoso del equipo blanquillo.
Foto: Liga de Fútbol Profesional