El Cádiz ha vencido en La Romareda en un partido donde el Real Zaragoza ha terminado con nueve jugadores por expulsiones de Verdasca y Cristian Álvarez.
El Real Zaragoza no ha podido lograr la segunda victoria consecutiva y continúa con su maldición en La Romareda, donde solo ha conseguido dos victorias en lo que va de temporada, y cuatro en todo el año 2017.
Al Cádiz, sin realizar un buen juego, le han bastado las dos expulsiones por errores infantiles, para llevarse un cómodo triunfo de La Romareda. Los de Natxo González jugaron con nueve hombres casi media hora y, en inferioridad, desde el minuto 27. Aún así, el equipo dio la cara y en muchas fases del encuentro no se notó la inferioridad.
La jugada clave llegó en la primera parte con la expulsión de Verdasca. El portugués le dijo al árbitro, el santanderino Cordero Vega, “eres muy malo” tras enseñarle una amarilla por protestar una falta clara anterior sobre Febas que no señaló. A partir de ahí el equipo aragonés aguantó, e incluso en algunos momentos fue superior, pero el marcador no se movería en la primera parte.
Ya en la reanudación, parecía que el Cádiz iba a tener en control del partido, mientras que los de Natxo González se conformaban con un buen empate en inferioridad. Sin embargo, poco duró la alegría, y en el minuto 52 Valentín se marcó en propia puerta. Parecía que una vez más la suerte no estaba de cara, y las ilusiones se desvanecían.
En los minutos posteriores el partido se enfrió, con un Cádiz que dejaba pasar los minutos mientras el Real Zaragoza era un quiero y no puedo. En el minuto 67, Cristian Álvarez salió lejos del área y después de un mal control con el pie, se ayudó de la mano y veía la tarjeta roja.
Con toda la ventaja en el campo, Romera hizo el 0-2 en el último momento para sentenciar el partido y terminar el año en La Romareda como se empezó: perdiendo. Los últimos dos partidos del año serán a domicilio.