Ríos Renovables Zaragoza, sostenido por una gran defensa liderada por Iván Bernad, vence 3-2 a Inter Movistar.
Ríos Renovables Zaragoza tumbó al líder de la Primera División y a uno de los mejores equipos del mundo: Inter Movistar, que llegaba al Siglo XXI con un balance de 10 victorias y 1 empate. En una lección de defensa magistral y de eficacia en ataque, los de Santi Herrero sumaron tres puntos de oro que les permite seguir soñando con disputar la Copa de España.
Ríos Renovables Zaragoza no se arrugó y presionó desde el principio la salida de balón de Inter Movistar, que avisaba antes de llegar al primer minuto por medio de Ricardinho. A partir de entonces las ocasiones fueron para Ríos por medio de Anás, Adri Ortego, Richi Felipe y Thiago Cabeça. Hasta el minuto siete no volvía a crear peligro Inter, con un tímido disparo de Bebe que atrapaba sin problemas Iván Bernad. La posesión era para Inter, aunque las ocasiones las ponía Ríos que de nuevo volvía a acercarse a la meta de Jesús Herrero con lanzamientos de Víctor Tejel y, también, Adrián Ortego. Solo en los minutos finales de la primera parte, y con Ríos acusando el desgaste físico, Inter Movistar puso en aprietos a Iván Bernad. Gadeia tenía hasta tres ocasiones que el ’25’ de Ríos se encargaba de desbaratar, provocando que se llegara al descanso con 0-0.
Inter Movistar empezaba fuerte en el segundo período, obligando a Ríos a dar un paso atrás. Víctor Tejel salvaba sobre la línea el gol de Inter Movistar, e Iván Bernad seguía con su recital de paradas. De un córner favorable al cuadro madrileño llegaba el 1-0 para Ríos. Thiago Cabeça se plantaba solo ante Jesús Herrero y mandaba el balón al fondo de la red. Inter quedó ‘tocado’ tras el tanto local y Ríos aprovecharía su siguiente ocasión para hacer el segundo. Richi Felipe remataba de forma acrobática y el cuero, tras tocar en un jugador visitante, acababa dentro de la portería de Jesús Herrero. A falta de siete minutos para el final del partido, Rafael Rato se enfundó la camiseta de portero-jugador y fue entonces cuando Ríos dio una lección de como defender el ataque de cinco. Solo Ricardinho, de penalti, fue capaz de batir a Iván Bernad. Con 1:05 por disputarse, y el 2-1 hacia presagiar un final de infarto hasta que apareció Víctor Tejel para sentenciar con el 3-1. Gadeia cerraba el marcador anotando el 3-2 definitivo.